Desde el camión de Bomberos Voluntarios de Lomas de Zamora, una multitud pudo observar la llegada de los Reyes Magos que circularon desde las calles Meeks y Laprida, por Boedo y la Avenida Hipólito Yrigoyen, hasta llegar a la sede del Círculo Católico de obreros, en la misma calle, al 8428.
“Ya es una tradición para los vecinos de Lomas”, aseguró el intendente Martín Insaurralde, que estuvo presente en el espectáculo acompañado por sus hijos, por el Obispo de la Diócesis de Lomas, Monseñor Jorge Lugones, y por funcionarios del Municipio, del Círculo Católico de Obreros y de la Cámara de Comercio.
Además de la recorrida y del impresionante cierre con fuegos artificiales, se montó un pesebre en la Plaza Grigera , y se contó con el acompañamiento musical de la Banda Municipal.
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